El encanto de esta ciudad llamada Brujas y situada en la región de Flandes reside en sus torres medievales, beaterios, edificaciones , canales, calles de adoquines, etc. No en balde fue declarada Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.

En esta bellísima ciudad apodada la Venecia del Norte, podrás admirar su casco urbano medieval dominado por el campanario de su Plaza Mayor. Al estar el centro cerrado a los vehículos, podrás pasear y explorar a pie o dando un paseo en barco por sus canales.

Plaza del mercado

Junto con la plaza del Burg, la plaza del Mercado es uno de los lugares con más ambiente de la ciudad. En ella se localiza la majestuosa Torre Campanario, y en el centro de la plaza dos esculturas de héroes populares.

Plaza del Burg

En esta plaza se encuentra el edificio del Ayuntamiento de Brujas y la Basílica de la Santa Sangre. En el Ayuntamiento de Brujas no debes dejar de visitar su impresionante Sala Gótica y la Sala de Juicios.

Torre del Campanario de Brujas

Con sus 83 metros de altura, es uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad. Posee 47 campanas y para ver las vistas panorámicas de la ciudad, deberás subir 366 escalones.

Canales de Brujas

Sus canales son un imprescindible que recorrer, pudiéndolo hacer a través de cruceros en las barcazas predispuestas para ello. Cada rincón es único.

Puente de San Bonifacio

Localizado en el centro de la ciudad, se encuentra escondido en el parque Aretnshof, a espaldas de la Iglesia de Nuestra Señora y junto al museo Groeninge. Un lugar que te embrujará entre los frondosos árboles y las casas medievales de piedra.

Iglesia de Nuestra Señora

Aunque hemos dado un breve repaso en pinceladas del encanto de esta bellísima ciudad, sin duda cualquier rincón te sorprenderá, como es este mágico lugar que parece salido de la Edad Media y te transporta totalmente en el tiempo.

La iglesia de Nuestra Señora, con sus 122,3 metros de altura es la estructura más alta de la ciudad y la segunda torre de ladrillo más alta del mundo.

Cada rincón de Brujas tiene su encanto y magia especial. No dejes de disfrutar situándote en su etapa medieval. Encontrarás además tiendecitas donde degustar del exquisito chocolate belga que deleitarán al más exquisito paladar.

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