De tapa en tapa y tiro porque me toca. Vamos a abrir boca y entre caña fresquita espumosa, un pinchito, una tapa y charlas con tus amigos o con tu familia o con tu pareja o ¿porqué no? tú solo, tú sola.
Tradición madrileña que forma parte de su cultura. Bares llenos, camarero que corre de un lado a otro ¡Ponme otra! y marchando una cerveza, acompañada de su tapita. Y ahora vámonos a otro bar, que se que ponen unas tapitas de chuparse los dedos. Un paseo y encontramos otro bar…. y a empezar de nuevo.
Es una manera de descubrir la gastronomía local, es la ración perfecta para degustar diferentes platos y quedarte con el hambre suficiente para repetir. Este ritual hace de la experiencia del tapeo, un imprescindible cuando te adentras en Madrid.
11 lugares imprescindibles para tapear
Algunos bares se han hecho hueco por brindar al cliente con alguna tapa especial, mejor presentada o más deliciosa que su competencia. Veamos por tanto que tapas han escalado para tener hueco en los más exquisitos paladares.
Las patatas bravas de Docamar, dicen que son las más sabrosas de Madrid. ¿Será su salsa? ¿será su corte de la patata o quizás será la forma de freírlas?
A lo mejor te apetecen unas croquetas de sabores que solo escucharlos, se te hace la boca agua. De morcilla con membrillo, de setas con puerros, de picadillo, de queso camembert con mermelada de frambuesa. Si es así, pásate por Casa Julio.
¡Que sería de España sin tortilla! Muchas maneras de prepararla y para gustos los colores. Te guste poco hecha o te guste cuajadita, todos los bares de Madrid tienen su manera especial de preparar la tortilla y ahora tú decides con cual te quedas. Podemos ir a uno de los bares más típicos de Madrid como lo es la Bodega La Ardosa.
Aunque quizás te apetezcan unos huevos estrellados y dicen por ahí que los mejores los tenemos en Casa Lucio, fama adquirida desde 1974 ¿te los vas a perder?
Dice mi amigo Juan, que es amante de las gambas y que le lleve a un lugar donde sean el plato estrella. Dicho y hecho, le llevo a El Abuelo y seguro que triunfo.
Si nos hemos decantado por productos de mar, no podemos perdernos las mejores tajadas de bacalao de la capital con 50 años a sus espaldas. Como no, hablamos de Casa Revuelta.
Y que sería de Madrid sin sus famosos callos. Servidos con chorizo de la manera tradicional, con morcilla, hueso de jamón y verdura nos los sirven en Casa Alberto.
Si vas con un grupo de amigos y quieres sorprenderles, no puedes perderte el Mercado de San Miguel. Es una parada gastronómica en pleno corazón de Madrid.
Hay quienes se decantan por lo 100% orgánico sin dejar de lado la calidad. Entonces, tu sitio es el Huerto de Lucas.
No deseas una tapa especial, sino distintas y variadas tapas. Entonces hay que ir al Mercado de San Ildefonso o al Mercado de San Antón.
Dime si después de este post, no te han entrado ganas de tomarte un aperitivo. ¡A mi sí!